1. Lee este correo electrónico que Jaime ha escrito a su hermano mayor sobre su primer día en su piso nuevo:
Hola David:¡Por fin me he independizado! Ahora vivo en un piso que está en el centro de la ciudad. Es grande y muy luminoso, aunque no parece muy silencioso. Voy a vivir con otras dos personas: una chica, María, y un chico, Pedro. María parece muy ordenada y limpia, sin embargo, no parece muy divertida. Hoy me ha explicado que, desde que vive en la ciudad, no ha hecho ninguna fiesta en el piso, ¡imagínate! Con Pedro eso no va a ser un problema, estoy seguro. A él le gusta mucho salir y es muy activo, además, es muy gracioso, me río mucho con sus bromas. No parece muy limpio ni demasiado responsable. Tampoco sé cuál es su trabajo. ¡Hoy es martes y se ha despertado a las tres de la tarde! Aún no tengo las llaves del piso, y no sé cómo pedírselas a Pedro, porque ahora mismo duerme en su habitación... Pero yo me tengo que ir a clase y necesito unas llaves. María tampoco está.
En fin, a ver qué hago...
Un abrazo,
Jaime
Imagina que eres David. Contesta al correo electrónico. ¿Qué pensará de los compañeros de piso de su hermano?
Hola hermano mio,
¡Estoy muy feliz por tì! Tengo muchas ganas de verte y, sobre todo, de ver este piso en el centro de la ciudad. Hablando de tus compañeros de cuarto, no confíes en las apariencias. Tal vez María se divierte con otras cosas que pueden gustar también a ti, y descubrirás que no es solo limpia y ordenada, sino también una chica divertida. Hablando de Pedro, no te puede parecer poco responsable porque se levantó de la cama a las 3. Quizás ha trabajado, o llegò tarde a casa por una vez . Si no te parece muy limpio, la solución es hablar con él, decirle que estáis juntos en la casa y tenéis reglas comunes, como la limpieza. Estoy convencido de que lo entenderá. El secreto de una convivencia feliz es que aprendáis unos de otros, que os conozcáis mejor.
Por fin, por favor, no hagas tonterías, despierta a Pedro y pregúntele dónde están la llaves, de seguro no se enfadará por esto.
Un abrazo,
David
2. Francisco tiene un problema y ha escrito un mensaje a un consultorio psicológico online. Léelo y contéstale con los consejos que te parezca adecuados.
Escribo porque estoy muy preocupado, casi deprimido, es algo que nunca me había sucedido no lo entiendo. Me miro al espejo y pienso: "este no soy yo". Tengo una mujer y unos hijos maravillosos, y una casa que es un sueño. Soy una persona ambiciosa: siempre me ha gustado trabajar, superarme y conseguir nuevos objetivos. Ocupo un puesto de responsabilidad en una gran empresa donde incluso la competencia entre compañeros es muy dura. Trabajo más de diez horas diarias y en los fines de semana y en las vacaciones leo y respondo correos y hago llamadas. Nunca dejo de pensar en mi empresa, pero estoy convencido de que todo lo que hago es imprescindible para estar a la altura de mis superiores y para seguir avanzando en mi carrera profesional. Pero ahora hace un tiempo que por la mañana me levanto muy cansado, tengo problemas de concentración y temo que mis compañeros se enteren. Me doy cuenta de que ya no veo a mis hijos, solo nos comunicamos con el ordenador. Mi mujer solo escucha mis problemas de trabajo, y tengo tantas preocupaciones que si me habla de otras cosas me veo incapaz de ponerle atención. Ya no pienso en divertirme, tampoco soy capaz de relajarme, siempre estoy muy cansado o de mal humor, y cualquier asunto me crea preocupaciones porque nunca tengo ni un momento para nada. ¿Qué puedo hacer? No quiero cambiar mi vida, pero siento que ya no la controlo... Muchas gracias por vuestras respuestas.
Buenos dìas Francisco,
hemos recibido su mensaje y nos agradecemos de que nos hayas escrito. El primer paso para sentirse bien es aceptar que necesita ayuda.
El mejor consejo que te puedo aconsejar es que te pidas un descanso del trabajo. Trabajar 10 horas diarias y también en los fines de semana duele psicológicamente, porque hace daño a lo que es tu salud mental. La carrera es sì una cosa muy importante, y es raro encontrar personas como tu, però hay que compartir el dìa entre trabajo y descanso, o lo que pasa es que estás distraído, cansado, de mal humor, proprio como tu ahora. Puedes demostrar ser un trabajador envidiable también yendo de vacaciones, tomando descanso y estando con tu familia, que estoy segura se preocupan por tì. Haz lo que hizo antes de sentirte así. ¿Por qué no haces un viaje este fin de semana con toda tu familia? ¿Por qué no llamas a tus amigos para salir juntos, comer en un restaurante, jugar con tus niños?
Mirate al espejo y pregúntate cuál puede ser la mejor solución para sentirte nuevamente tu. Que te gustarìa hacer más. Te aconsejo también hablar con un psicólogo directamente en nuestro consultorio, si lo necesita, así podrà hablar más libremente y podríamos aconsejarte de la mejor manera.
Espero en su respuesta muy pronto,
Doctora Viola Pellini
Consultorio psicológico online